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sábado, 6 de febrero de 2016

Subida a Karakate por Soraluze


Estamos de estreno. Bicicleta BH Prisma comprada de segunda mano en la guipuzcoana localidad de Soraluze (Placencia de las Armas). Cumplía todos los requisitos: buena, bonita, barata...y con el desarrollo que a mi mgusta: 50-34 (compacto para platos) y 12-30 (piñones holgados...). Hoy mismo los pondré a prueba.
Para probarla, que mejor que iniciar la subida a Karakate de 7.24km al 8,4% de pendiente media y con brutales rampas del 18% y medias kilométricas del 12%.
Es por tanto un puerto muy exigente aunque cortito. Coeficiente global 170.
El puerto empieza en la misma población de Placencia de las Armas, que se encuentra entre montañas y con un acceso difícil a través de un polígono pasando un puente sobre el río Deba.
Atravesando todo el centro llegamos a la zona donde se inicia el puerto.
El puerto es duro desde el principio donde coge pendientes rápidamente del 8% con alguna rampa de dos cifras, aunque se puede llevar bien.
A medida que se va subiendo las vistas nos permiten ver todo el valle con el cauce del Deba.
Al tomar un desvio que nos indica la cima del Karakate (y del dolmen, aunque no entiendo mucho de euskera) la carretera nos lleva hacia San Andrés que es una explanada con un frontón y poco más. 
Estos kilómetros hasta pasado San Andrés son los más suaves en torno al 5-7%

A partir de aquí se acaban los tramos fáciles y empiezan tramos constantes con un mínimo del 10%. Se atraviesan zonas de caseríos y a la altura del de Goenetxetxo  se alcanza el 18.5% en el km 5. Es momento de probar el piñon 30 de la nueva bici.
Se trata de un tramo muy duro y que persiste hasta el final prácticamente sin respiro.
La carretera también se estrecha pero las vistas empiezan a ser espectaculares sobre todo en la zona de talud de la montaña.

Sobre el km 5.5 se puede ver ya el repetidor de la cima arriba a la izquierda y el objetivo empieza estar más cerca.
Aún así todavía nos queda un buen tramo de un kilómetro y medio bastante constante y duro que por fin nos acerca al repetidor.
La última recta de acceso permite ver una roca gigante sujeta por una zapata de hormigón, no se si será el dolmen que indican.
Superada esta zona, última curva a la derecha y acometemos la rampa final hacia la explanada del repetidor donde las vistas son espectaculares.
Karakate por tanto es un puerto muy exigente aunque relativamente corto. La pendiente media del 8.4% lo dice todo. Cuesta llegar a la cima, aunque como todos los puertos de la zona, merece con creces la pena.